Nunca sabre el porque
de ese rumor del viento
que agita el quebranto
de todo aquello que anhelamos,
fugitivos del alma viajando
en el tiempo ,arco iris
perdidos dibujan el espacio,
sombría la noche vacía y perdida
buscando aventuras vagando
entre recuerdos solitarios,
no adivino el porvenir
de esa necedad irónica
irreverente de las fabulas,
esculpidas con nombre propio,
anatema de delirios ruborizan tes
esquemas propios del desorden
agua enfangada y sucia, pésimo
el atardecer cuando la noche llega
con la carga del día con ocurrencia
perdida.