No dejare partir, esa mi vida,
sola y perdida bajo la luna,
llorando sola ,la cubriré
del manto ese de las estrellas,
de tercio pelo y seda fina,
de los silencios callados
se extiende una mano inquieta,
donde se queda preñada
la amargura sin los besos,
no dejare que el viento
me arrastre ni la marea
me lleve,me cierre el paso
el delirio,las caricias me saben
a poco,frías siento las manos
y la mirada cruel ,risa de extraño
los besos,el humo de un cigarro
me recuerdan las noches,
en aquel bar cierran pasa
la noche,tocan blues
con un saxofón,
parten mis huellas
desde que nací
a ese rincón de mi vida,
un sueño,un beso,una ilusión.
Dejare morir la rosa
si la espina se me clava,
y al horizonte aquel
que no es mio, no miraran
mis ojos ,de esparto son
mis zapatos cubiertos
de hilo tela con un
cordón de cinta blanca,
respirar del mar
yo quiero,
para morir mañana.
pep